Fernando Inçaurgarat llegó a Santa Teresita en 1996, poco antes de cumplir los 30. Había obtenido recientemente su título de Profesor Nacional de Pintura y no dudó en buscar una oportunidad en La Costa.
Vino desde Lomas de Zamora en donde creció, aunque había nacido en Lanús. En la zona sur inició sus primeros pasos en las artes plásticas, formando parte de la Sociedad de Artistas Plásticos y teniendo un emprendimiento artístico (una galería de arte, con talleres y un teatro).
También comenzó a participar en concursos de dibujo y pintura y obtuvo varios premios.
Desde que llegó a La Costa trabajó como docente de arte en varias escuelas primarias y secundarias, sobre todo en Zona Centro, hasta 2017. Lo que lo atrajo del lugar, además de lo que busca todo joven que son oportunidades de trabajo y crecimiento personal, fue la tranquilidad del lugar y fundamentalmente el mar.
Con el tiempo comenzó a vincularse con otros artistas que lo llevaron a participar en concursos de escultura en nieve en Estados Unidos, Canadá, Japón e Italia en los que ganaron numerosos premios. Con otros siguió estudiando y obtuvo su Licenciatura en Artes Plásticas. Paralelamente también realizaba exposiciones de pintura en Europa -en España y Holanda- colectivas en galerías de Canadá, México, Estados Unidos y también varias muestras individuales en Pinamar, Mar del Plata, La Costa y en el Gran Buenos Aires.
Junto a Alfredo Juan Diez realizaron el Pesebre de esculturas de resina y arena que se encuentra actualmente en el Paseo del Jagüel, en Santa Teresita y también hicieron esculturas en Austria, Japón, Estados Unidos, Canadá y Suecia.
En Suecia fue seleccionado para realizar en dos oportunidades una habitación en el mundialmente conocido Hotel de Hielo, en Jukkasjärvi. Con todo esto se convirtió en el artista costero con más participaciones y premios internacionales, siempre representando al Partido de La Costa y a la Argentina.
En todo este tiempo participó también en varias instituciones de la zona -como el Museo de Santa Teresita- y en grupos de artistas.
Actualmente está más dedicado a la pintura, preparando muestras, realizando obras en pastel tiza como la portada de esta revista.
Si se le pregunta por sus proyectos contesta son demasiados tal vez. “Lo que pasa es que hay mucho por hacer en La Costa.
Un lugar turístico se tiene que nutrir de propuestas culturales y artísticas, porque acompañando a la naturaleza está la posibilidad de disfrutar de la cultura y el arte, como ya ha sido demostrado en muchas ciudades y países que viven del turismo. Mi deseo es tener todo el tiempo para ello.”