Charlas de Café en el Multicultural de Mar de Ajó – Presentación del libro: HISTORIA DEL PARTIDO DE LA COSTA

Desde hace 10 años se realizan “Charlas de Café en el Bosque de Costa del Este”, sin embargo  el domingo 28 de octubre en el Multicultural de Mar de Ajó, realizaron la presentación del libro Historia del Partido de la Costa, de Fabián Domínguez. Los organizadores  eligieron ese espacio cultural  porque se  le rindió un reconocimiento al primer  Intendente democrático del Pdo. de La Costa  Dr. Juan de Jesús, acompañado por el actual intendente Juan Pablo de Jesús, Marcelo Pavka Concejal y Gustavo Caruso Secretario de Producción. Una tarde noche, donde el numeroso público que colmaba las instalaciones,  compartieron emociones y anécdotas. Estuvieron presentes funcionarios de ayer y de hoy entre ellos la Senadora Gabriela De María, militantes de la primera hora  que recibieron un libro por parte del Dr. de Jesús,  y se hizo presente el primer candidato en 1983 por la UCR  Atilio Ubieta contrincante del PJ. La apertura y locución estuvo a cargo de Maridel Cano y Abel Acevedo, quienes  con su habitual calidez y profesionalismo  a través de videos y fotos,  emocionaron a hombres y mujeres, al narrar la historia de vida del Dr. Juan de Jesús. 

 

Maridel y Abel:

Bienvenidos a Charlas de Café, hoy no es en el bosque, sino en la playa en Mar de Ajó, bienvenidas, compañeras, amigas,  vecinas, vecinos amigos,. Desde hace 11 años llevamos a cabo en el living de nuestra casa taller en Gardenias 673 de Costa del Este, el ciclo Charlas de Café, con acceso libre y gratuito. Esta es la charla número 77, para los que no nos conocen, Charlas de Café es un ciclo cultural, un encuentro, hoy un poco más amplio, de amigos. Nuestro lema, como figura en el folleto dice que a través del arte recuperamos las utopías, esos sueños, esos deseos de ser mejor, desde lo individual que luego se hace colectivo.

Nos sentimos muy alagados porque cuando decimos que Charlas de Café las hacemos en nuestra casa, hoy podemos decir también que esta charla de café se hace en nuestra casa, porque ésta es la casa de todos, porque los espacios públicos deben ser apropiados por nosotros, por el pueblo, apropiarlo, utilizarlo de la mejor manera posible, para poder construir una sociedad fantástica, más justa, más amorosa, más de encuentro y de construcción.

Creemos que el arte y la cultura es derecho ciudadano, es un derecho social, pero también junto con el derecho, como casi siempre sucede, están las obligaciones. Cuál es la obligación nuestra como público, es lo que Uds. hicieron hoy, un domingo, un día de familia, dejar quizás ese momento de esparcimiento para tener otro momento de esparcimiento y de encuentro que es éste, aquí, todos juntos. A nosotros en lo personal agradecemos mucho su presencia.

Con esta breve introducción damos el marco a esta charla, al cumplirse hace unos meses 40 años del Partido de La Costa y cumplirse 35 años   cuando fue electo Juan de Jesús, el primer intendente de la democracia en nuestro Distrito.

Uds. saben que en el libro de  Historia del Partido de La Costa, Juan Pablo de Jesús también nos ha dedicado un prólogo y nos gustaría que él  nos muestre su mirada a partir de estos 35 años.

Juan Pablo:

“Buenas tardes a todos los presentes, felicitar la iniciativa de Abel y Maridel que nos acompañan, también me han recibido en su casa en alguna oportunidad, que hemos estado en el proceso de elaboración de este libro, junto a Fabián Domínguez. Uno celebra que se pueda llevar adelante este tipo de iniciativa porque permite que la memoria de una comunidad quede plasmada en este instrumento que algunos dicen que ya va quedando obsoleto pero a mí me encanta, leerlo en papel. (…) La parte del libro que habla de mi padre, que ha crecido acá, cabe contarles que mi abuelo vino en el año ´38 a San Clemente desde Portugal, primero a Buenos Aires y luego para acá. Los servicios educativos eran muy escasos y tuvo que llevar a Buenos Aires a su hijo para que hiciera el secundario y después estudiar en la Universidad en Córdoba. Hizo un gran sacrificio seguramente. Nosotros nos hemos impuesto como política que los jóvenes se puedan realizar en nuestro Distrito, que puedan estudiar acá. (…) Lo que siempre Juan me “picoteó”,  que siempre vayamos hacia adelante, hacia un futuro mejor y decir que nosotros no llegamos a nuestro techo, nos queda  mucho más por hacer. Yo estoy muy orgulloso de estar en este lugar, agradecido a mi abuelo que en el año ´38 haya elegido  estas tierras, que este sea nuestro lugar, que sea nuestra casa. (…) Para terminar quiero contarles una anécdota, en el año ´83 yo tenía 10 años, mi padre fue candidato a intendente, ganó las elecciones,  Marcelo Pavka era mi maestro de 5° grado, en San Clemente. Iba a la mañana a la escuela y a la tarde cuando salían a pintar, me llevaban, era medio mascota de los muchachos de la Juventud,  entre los que también estaba Gustavo Caruso, recuerdo que cuando se hacía más de noche íbamos también con Juan con el termo de café y un poco de ginebra, el invierno era más crudo que ahora (risas). Recuerdo esa campaña, la viví mucho, lo acompañé siempre a Juan. Lo he acompañado tanto acá en el Distrito como en la Provincia. Llegó el día de la elección y se ganó.

La anécdota de ese  día es que todos celebramos esa democracia, el contrincante que en esa oportunidad iba por el Partido Radical Atilio Ubieta,  una amigo de mi padre de la infancia, se criaron juntos y hay una foto que está en este libro, en la cual están todos caminando por la calle 1 de San Clemente tanto el candidato a intendente Radical como mi padre candidato a intendente por el Peronismo, varios muchachos de la Juventud, que están caminando y celebrando el regreso de la democracia, porque creo que ese día ganamos todos, ganó la Argentina con la recuperación de la democracia. Íbamos caminando a la casa de mi abuela en San Clemente, a la calle 3 y 1, y allí mi abuela tenía un pequeño balcón y salieron a saludar. Es un lindo recuerdo, esperemos que en algún momento la política vuelva a ser de esa manera, que a veces se va perdiendo. Que sea una política de ideas, que no sea del agravio, de lo personal ni de persecución.

Este libro no nos va a permitir que nos olvidemos de la historia del Partido de La Costa y de todo el esfuerzo que significó llegar hasta este lugar. Para mí estar aquí con mi padre es un orgullo, lo adoro, es la persona más joven que conozco. No conozco a nadie con el espíritu más joven que mi padre, es un poco inquieto, curioso, pero es una persona muy sabia, todos Uds. saben de su  solidaridad, es una enseñanza permanente, con las palabras que nunca le faltan y con las acciones.

 

GUSTAVO CARUSO

La verdad es una tarde muy emotiva para todos. La participación que pude haber tenido en el libro me permitió mirar mi vida hacia atrás, y la de muchos compañeros y compañeras de muchos años. Provengo de una familia peronista, hijo de Elvio y de Araceli, mi padre un trabajador muy fiel a sus principios, la anécdota de él era que en San Clemente en aquellos años había muy poca gente, cada vecino que se quedaba era un logro. En marzo contábamos cuanta gente había, un vecino más, una familia más, San Clemente crecía, La Costa crecía. Mi padre le decía a mi madre, se quedó esta familia vieja, y decía ese hombre es muy bueno, y ella preguntaba ¿por qué Elvio? Y porque ese hombre es peronista, así medía mi padre a las personas. (…)  Otra anécdota es que en el Colegio de Monjas donde estudié yo. Como todo colegio privado era susceptible a toda influencia política en ese momento del que fuera intendente del Partido de La Costa. Se nos llevó a todos los alumnos de aquel momento a hacer una huelga de brazos caídos, para impedir a los profesores de aquel momento Juan de Jesús, profesor de anatomía,  Cristina Bianco de botánica, ocho profesores en total que claramente tenían un sentido popular, nosotros como alumnos en aquel momento de primer año, teníamos en claro que ellos no eran lo mismo. A mí me toco un colegio donde había mucha discriminación y había muchas preferencias y en definitiva ellos lograron su objetivo pero nosotros también logramos otro y es que casi la mitad del colegio se fuera a estudiar al Colegio Nacional de General Lavalle. Eso nos significaba irnos a dedo, volver a dedo, pero lo más importante era que nos iba afianzado cada vez más tener en claro cuáles eran nuestros verdaderos ideales. Redondeando como anécdota final, el 24 de marzo de 1976, los alumnos de 4° año del Colegio Nacional de General Lavalle, en esa época mi padre era concejal del Partido de General Lavalle junto con José Martínez, José López Dopazo y con Jorge Ochoa. Ese día había sesiones ordinarias en el Concejo Deliberante, a las 5 de la mañana, Radio Colonia, golpe militar una vez más, no sorpresivo porque lamentablemente, era una sociedad que estaba propugnando esto, derrocar a Isabel Martínez de Perón. Nos levantamos, mi padre me dice, nos vamos a General Lavalle, mi madre le dice, fijate lo que vas a hacer y él contesta, yo soy concejal elegido por el pueblo y voy a ir y cumplir con mi mandato. Ya en la rotonda de San Clemente estaban los militares y no nos querían dejar pasar, logramos pasar, en la rotonda de Gral. Lavalle también estaban, tampoco nos querían dejar pasar, mi papá que tenía mucho temperamento logró imponerse y pasamos. El se fue al Concejo Deliberante y yo al Colegio Nacional, en la escalinata del colegio estaba el director y la celadora, pensé que me estaban esperando porque era un día especial, sí me estaban esperando para decirme “ahora sí te vamos a poder echar”. Cuento esta anécdota porque primero no me pudieron echar, no se los permití, y segundo porque me sirvió para el resto de mi vida para afianzar mis convicciones y mis ideales.

 

MARCELO PAVKA:

Hoy en día no se puede vivir sin whatsapp ni sin facebook. En esa época, el diario Pionero era el único que había en La Costa, y nos invitan a pocos días de la interna el 14 de agosto del ´83 que e ese momento no se elegía intendente ni concejales, sino Consejo de Partido quien era luego el que designaba a los candidatos. Nosotros íbamos con la lista 87 que llevaba como candidato a presidente del Consejo de Partido y todos sabíamos que si ganaba era candidato a intendente, al compañero Juan de Jesús. Nosotros estábamos absolutamente convencidos que iba a triunfar ese proyecto como finalmente pasó, porque me parece que desde aquella época, Juan interpretaba el sentimiento del tipo común, del hombre de la calle, del laburante. Nosotros caminábamos, éramos muy pibes, salíamos de la terrible dictadura genocida, teníamos todo el idealismo, nos íbamos formando, muchos nos decían el rol de Uds., es pegar carteles, pintar las paredes y en esto quiero decir que nosotros estábamos convencidos. Un día habíamos terminado en aquello que nos habían encomendado, los compañeros mayores, estábamos cansados y suena una bocina en mi casa, un Taunus gris, de acá el amigo,  Gustavo, y me dice vamos, ¿a dónde? Vamos que tenemos una reunión. Era la primero reunión donde se empezó a discutir el plan de gobierno, ya con Juan electo  como candidato a intendente, el plan de gobierno con el que nos íbamos a presentar a elecciones. El orgullo que sentíamos, un poco más de 20 años, jóvenes, idealistas, que nos convocaran a participar del plan de gobierno. Hoy habiendo tantos jóvenes presentes, como decía Gustavo, sería fantástico poder transmitirles ese convencimiento que nosotros teníamos en esa época y que 35 años después seguimos teniendo.

Abel y Maridel: Entre las primeras fotos que rescatamos del Dr. de Jesús, y que están en el libro, hay una que nos impactó y  tiene que ver con el que tenemos en nuestras manos . Un libro con tapas de cuero y nos gustaría que  Juan nos contara, como es que  lo guarda desde hace tantos años,  uno de sus más preciados tesoros.

JUAN DE JESUS

En primer lugar quiero que sepan que estoy agradecido a la vida por ser parte de la historia del lugar que más quiero en el mundo.

(…) En relación a cómo me quedé con ese libro tiene que ver con mi  paso por el Colegio de Salesianos donde cursé la secundaria en Capital Federal,  yo tendría unos 13 años, cuando en el año 1955, luego de la Revolución Libertadora comenzaron cambiar muchas cosas en nuestro país, pero cuando uno  tiene el espíritu de libertad, no lo puede modificar. Recuerdo que  nos sentábamos en un pupitre con tapa que se levantaba y adentro guardábamos los libros, entre ellos estaba “La Razón de mi vida” de Eva Perón. Un día llegó el profesor de literatura y nos dijo: saquen el libro de Eva y lo colocan en el escritorio, porque ya no es obligatorio leerlo. En ese momento yo recordé cuanto significaba para mis padres aquel libro, especialmente cuando en 1952 ella murió, entonces yo  tome coraje y  del pupitre saqué otro libro y deje el de la razón de mi vida adentro ¿Cuál puse en el escritorio? Uno de botánica, lo mezcle entre todos los demás  y cuando terminó la clase, me lo llevé y  lo guarde en el armario de la pieza, porque ahí estaba  pupilo. Por eso conservé este libro original y creo que fue lo que marco  cual sería mi  destino, porque el profesor no me pidió autorización para ponerlo sobre su escritorio,  creo que con esa  actitud que tomé fue lo que  comenzó a marcar el destino de lo que luego haría  el resto de mi vida.

Finalizó la jornada con la entrega de una plaqueta a su trayectoria y él mismo firmó los libros  a quienes lo adquirieron en el lugar, como es costumbre en todas las Charlas de Café, con un CD,  en esta oportunidad  fue el libro: Historia de Partido de La Costa.

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